El 71 % de las 200 toneladas de carne que se envían a Japón son cortes enfriados y el resto son congelados, explicó el presidente del Instituto Nacional de Carnes (INAC), Federico Stanham. Añadió que ha aumentado la cantidad de empresas exportadoras desde el primer embarque realizado febrero a ese mercado, que compra a 6.600 dólares la tonelada, unos 2.600 más que el promedio mundial.
El 13 de febrero partió rumbo a Japón el primer envío de carnes uruguayas luego de 19 años de haber sido interrumpido ese intercambio.
El cargamento fue de cuatro toneladas, que sirvieron para la presentación de la producción uruguaya en la principal feria de alimentos del país asiático. Siete meses después, se incrementó la cantidad de producto a 200 toneladas, así como las empresas que remiten su producción a Japón de dos a cinco, aseguró Stanham.
En diálogo con la Secretaría de Comunicación Institucional, el jerarca de la INAC explicó que lo más llamativo para las autoridades es que los 55 días de flete y la demanda de carne para la elaboración de hamburguesas ubicaban a la carne congelada uruguaya como el principal producto hacia ese destino. Sin embargo, el mayor incremento se registra en las carnes enfriadas, que son cortes de mayor valor.
“Nos cambió la expectativa que teníamos y podemos decir que el 71 % del volumen comercializado es enfriado, corte de alto valor mayoritariamente. De eso, el 60 % son cortes finos, 27 % del delantero y 8 % bloques congelados. Abre una expectativa muy fuerte porque estamos jugando a la par contra Australia y Estados Unidos, los grandes que dominan ese mercado”, detalló Stanham.
En promedio, la tonelada de carne cuesta unos 4.000 dólares en el mercado mundial. Los grandes pagan por debajo de ese valor, mientras que Europa y Japón llegan hasta 6.600 dólares, aseveró el presidente de INAC. “Lo importante es que nuestros exportadores se adaptan rápidamente a los cambios que el mercado indica”, finalizó.